Especialistas de CINTECX y la Politécnica de Valencia descubren los mecanismos ocultos que evitan que los puentes se derrumben ante eventos catastróficos

«Demostraron que el comportamiento de estas estructuras es similar al de las telas de araña». El estudio, publicado en Nature, aporta nuevas claves para lograr puentes más seguros.

DUVI 03/09/2025
Un equipo del Centro de Investigación en Tecnologías, Energía y Procesos Industriales de la Universidad de Vigo, CINTECX y de la Universitat Politècnica de València (UPV) acaba de publicar en Nature los resultados de un estudio en el que descubrieron por qué los puentes —en concreto, los de celosía de acero— no se derrumban cuando se ven afectados por un evento catastrófico, ya sea un impacto, un terremoto, etc., llegando a la conclusión de que su comportamiento guarda similitud con el de las telas de araña. Así demuestran que, al igual que estas se adaptan y siguen atrapando presas después de sufrir daños, los puentes de acero son capaces de resistir este tipo de eventos sin colapsar.

“Demostramos que, del mismo modo que las telas de araña son capaces de adaptarse y seguir atrapando presas tras sufrir daños, los puentes de celosía de acero dañados aún pueden ser capaces de resistir cargas incluso mayores que las que soportan en condiciones normales de uso y no derrumbarse”, destaca José M. Adam, investigador del Instituto ICITECH de la Universitat Politècnica de València y coordinador del proyecto Pont3, financiado por el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, en el que se integra el trabajo realizado.

Los puentes son elementos críticos de las redes de transporte, y su colapso —o derrumbe— puede tener consecuencias muy graves, incluyendo víctimas mortales y pérdidas económicas que pueden alcanzar millones de euros por cada día de cierre. “Además, ante eventos naturales cada vez más intensos e impredecibles, y los cambios ambientales que están acelerando el deterioro de los puentes, es fundamental garantizar que estas estructuras no colapsen ante un fallo local, y en este sentido es en el que hemos avanzado con nuestro estudio”, añade Belén Riveiro, investigadora de CINTECX y responsable del subproyecto Pont3 en la Universidad de Vigo.

Unos sí, otros no

Hasta ahora no estaba claro por qué los fallos iniciales de ciertos elementos se propagan de forma “desproporcionada” en algunos casos, mientras que en otros apenas afectan a la funcionalidad del puente.

En su trabajo, los investigadores e investigadoras de CINTECX y la Politècnica de València descubrieron y caracterizaron los mecanismos secundarios que permiten a estos puentes ser más resistentes —desarrollan una resistencia latente— y no colapsar. “Gracias a ello, somos capaces de entender cómo pueden seguir soportando cargas después del fallo inicial de algún elemento”, añade Carlos Lázaro, investigador principal del subproyecto Pont3 de la UPV.

Imitar y aprender de la naturaleza: de los lagartos a las telas de araña

El trabajo del equipo de CINTECX y UPV aporta nuevas claves para el diseño de puentes más seguros y resilientes ante eventos extremos, y contribuye a mejorar las estrategias de monitorización, evaluación y refuerzo de puentes ya existentes. Además, sus conclusiones pueden ayudar a definir nuevos requisitos de robustez para puentes de celosía de acero.

“Todo ello con un objetivo fundamental: mejorar la seguridad de estas infraestructuras, tan importantes y extendidas en las redes de transporte. Y la clave está, de nuevo, en la naturaleza; el año pasado descubrimos cómo lograr que los edificios no colapsen ante un evento extremo, imitando para ello a los lagartos. En esta ocasión aprendemos de las telas de araña, cuyo comportamiento guarda similitudes con el de los puentes de celosía de acero. Esto lo demostramos al comparar nuestro trabajo con otro publicado en Nature en 2012, precisamente sobre telas de araña”, concluye José M. Adam.

Apoyo inicial de la Fundación BBVA

El punto de partida de este trabajo publicado en Nature son dos Becas Leonardo que la Fundación BBVA otorgó a Belén Riveiro (en el año 2021) y José M. Adam (en el año 2017). La primera se centró en la evaluación de puentes existentes y la segunda en el estudio de los mecanismos resistentes de edificios ante fallos locales.

Vídeo resumen del proyecto